lunes, 21 de abril de 2008

LA ALDEA DE LA POESIA REFLEXIVA

Pobres sometidas

Por Beatriz Cid*


A todas las mujeres que aún creen en los cuentos que desde pequeñas las sometieron a la creación ficticia de los ideales propiciados por el sistema para fomentar, entre otras situaciones, mujeres sin espacios públicos, tan solo débiles estructuras producidas para satisfacer el deseo del otro.


Todo les llega del cielo,
rezan y rezan día y noche,
se sientan y esperan
y cuando desde el cielo
gentilmente fluye lo esperado
agradecen y siguen sentadas,
las pobres de las sometidas.

Los mandatos les prometieron
un Príncipe alado y maravillado,
proveerlas, exigirles,
dádivas que creen riquezas,
ellas, las sometidas.
Pobres mujeres que nada reclaman
tan solo la simple confianza
de seguir sentadas.

Se levantan alguna vez
que otra vez,
se creen independizadas,
pero nuevamente
ante la llegada del Príncipe,
reiteran conductas,
en esa espera
–ociosa, la esperada espera–
porque son ellas las mujeres,
mujeres las sometidas.

Pobres de esas mujeres,
asienten una y otra vez
a los caprichos del otro.
Ya no piensan, responden,
agradan, palabras pensadas,
cuerpos moldeados,
bocas agrandadas.

Pasaron los años,
ellas, las estacionadas
nada buscan, no bucean,
se desalientan aburridas
porque son tan solo
pobres mujeres,
mujeres las sometidas.

( *Poeta y economista,integrante de la Sociedad
Argentina de Escritores -SADE)
09-03-08


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